¡Juego de pies y más!

Luscious y su sugar daddy se trasladan a la cama. Ella recompensa a su enorme y palpitante schlong con una garganta profunda y sexy mientras él le da una jodida adoración con los dedos y los pies. ¡Qué amante tan generoso es! ¡Luscious solo podía sonreír mientras conseguía el mejor sexo de su vida!