Dos para Kate

Kate nos dijo que quería algo nuevo y emocionante, así que la conectamos con dos pernos calientes, con la condición de que se vistiera como una zorra y rogara que le taparan todos los agujeros. Kate tenía miedo, pero podíamos ver que ella también estaba emocionada. Al final resultó que su entusiasmo ganó porque terminó rogando por un pene en el culo.