Joder con los pantalones puestos

Vi a esta pequeña en las películas y me ofrecí a llevarla a casa,pero resultó que estaba más interesada en montar sus labios suaves arriba y abajo de mi dura polla y dejarse joder por un completo extraño. De acuerdo,llevé a la perra a casa y la tuve gritando de placer con nuestros pantalones todavía puestos y mis bolas de pene en lo profundo de su apretado coño puliendo y estirando ese jugoso agujero de mierda sin piedad alguna. La llamé un taxi y era 20 minutos tarde,así que nos quedaba tiempo suficiente para otro rapidito. Puede que nunca la vuelva a ver,pero la ciudad está llena de guapas ingenuas como ella, a las que les encantan los chicos guapos y el sexo casual.