Carajo sorpresa total

Nadin ni siquiera pensó en besar a este tipo en una primera cita, y mucho menos en tener relaciones sexuales con él, pero de alguna manera al final de la noche se encontró completamente desnuda entre sus piernas y chupando su gran polla dura como una zorra. Tomando este enorme asta de bandera en lo profundo de su boca desató sus deseos sagrados y la siguió con la polla de montar y dejándose follar a la perrera por este cachorro joven y cachondo. Nadie se folló su coño tan bien y la hizo correrse tan duro y el placer debe haber sido mayor que la vergüenza si ella seguía rogándole que la hiciera una y otra vez.