Élder Benjamin Blue: Supervisando su pecado

El inocente élder Benjamin Blue no ha podido mantener su mente despejada del deseo de tocarse a sí mismo, y el presidente Manuel Skye puede oler la culpa del niño. Hace que el niño misionero se confiese y luego le muestra cómo drenar adecuadamente un delicioso juego de pelotas con un golpeteo a pelo que deja al niño en un fervor orgásmico.