Kerry Morena

Kerry estaba pasando el rato en la cocina con lencería horneando galletas y se estaba divirtiendo cuando su hombre salió, la vio luciendo sexy y la rodeó con las manos para ahuecar sus alegres tetas naturales mientras ella seguía horneando. Desvió su atención de las galletas hacia él y lo besó apasionadamente antes de arrodillarse para poder chupar su polla grande y gruesa. La mamada fue tan buena que la tomó de la mano y la llevó al dormitorio, donde la recostó y le comió el coño como un profesional antes de ponerla a cuatro patas para poder perforarla profundamente y con fuerza por detrás. Su coño rosado y afeitado se corrió por toda su polla cuando la dejó ponerse encima y cabalgar, para que pudiera mover las caderas y golpear el lugar correcto. Rodando sobre la cama, los dos follaron como un reguero de pólvora y ella terminó boca arriba mientras él golpeaba su coño, luego se retiró y la bañó con su carga pegajosa.