Conejito Lana

Cuando el ladrón entró en la casa de Lana Bunny, pensó que estaba dormida cuando en realidad estaba descansando desnuda en la sauna. Ella no le tenía miedo, en cambio le dio un ultimátum. No llamaría a la policía mientras él se ocupara de sus necesidades. Empujando su cara contra su coño afeitado y suave, hizo que la pelirroja gimiera de deseo. Después de una rápida mamada, la inclinó sobre la mesa del comedor y embistió su vara en su apretado coño por detrás. Es un completo extraño que entró en su casa y ahora Lana se estaba corriendo sobre su polla mientras él la follaba a pelo. Ella consiguió exactamente lo que quería cuando hicieron un 69 caliente, luego se puso encima y lo montó hasta que se corrió de nuevo. Sentir su apretado coño correrse por toda su polla lo puso al límite, lo que provocó que se corriera en su coño rosado y bien follado.