Savannah Sly se mueve como un gatito

Savannah Sly se arroja al sofá y le suelta las manos. Le aprietan y acarician las tetas, le corren por el cuerpo caliente y le masajean los muslos. Una sonrisa parte sus labios mientras sus dedos se dirigen a su clítoris y comienzan a frotarse. Rápidamente se retuerce y gime, sus dedos saben demasiado bien lo que desea. Cuando el orgasmo cae sobre su cuerpo, es tan intenso que sus dedos se enroscan hasta que sus pies comienzan a dolerle.